Criar a los hijos sin una red de apoyo puede ser una tarea abrumadora. Aunque no todas las familias lactantes enfrentan esta situación, quienes la viven conocen el desafío que implica.
En la actualidad, cada vez más familias transitan el proceso de la crianza con sentimientos de soledad y muchas veces frustración. Antes era un tema principalmente abordado entre aquellos que emigraban y se encontraban lejos de su círculo familiar y de amigos, ahora es una realidad que familias que viven cerca de sus seres queridos.
¿Qué está sucediendo?
👉Cambio de roles de los abuelos: Los adultos mayores tienen una vida más activa, con trabajos, viajes y planes con amigos, reduciendo el tiempo disponible para cuidar a sus nietos.
Discrepancia en los criterios de crianza:
- Uso de celulares y tv sin control por parte de los abuelos.
- Ofrecimiento de alimentos hoy detectados como no saludables, que en muchos hogares se prohíbe o limita.
- La picardía de secretos o pequeñas mentiras a los padres.
- Enfoque diferente en la establecimiento de límites, alejándose del modelo de crianza respetuoso elegido por los padres.
Además, otro aspecto que contribuye a esta situación es el hecho de que las mujeres están posponiendo cada vez más la maternidad, teniendo hijos pasados los 30 y cerca de los 40 años. Esto conlleva a que los abuelos son mucho más mayores y, a su vez, pueden requerir también cuidados, lo que agrega otra responsabilidad y estrés para muchas familias.
En este contexto, las licencias y normas de lactancia en el trabajo, obligatorias en Ecuador, cobran aún más relevancia, adaptándose a los tiempos y la evolución social que se da de manera natural.
No tener una red de apoyo para la crianza puede generar sentimientos de soledad y frustración, por eso es importante buscar redes de apoyo emocional profesional o amigos y personas que están pasando por situaciones similares.
¿Te sientes identificado con alguna de estas experiencias?